Amanar en Red S. Coop.
La palabra amanar proviene etimológicamente del prefijo “a” por el latín “ad” cercanía, del sustantivo “mano” y de sufijo flexivo “ar” infinitivo de los verbos. Es un verbo transitivo poco usado que en aragonés significa “ir al lado de alguien” y en castellano “poner a la mano algo, preparar, prevenir, elaborar, realizar, desarrollar, proveer…”
Amanar no sólo da nombre legal y comercial a nuestro proyecto, también describe y sintetiza la esencia del mismo; “acompañamiento, mentorización, asesoramiento y gestión para entidades y proyectos de la economía social solidaria transformadora” y explicita nuestra manera y vocación de hacer; en COLECTIVO y en RED.
Somos un proyecto cooperativo con vocación transformadora que nace en 2017 en Zaragoza conformado por un equipo de personas con más de 25 años de experiencia en el sector de la economía social y solidaria.
Nuestro objetivo principal es la construcción y consolidación de alternativas socioeconómicas al modelo imperante y trabajamos conjuntamente para resolver las necesidades de las entidades y personas a las que acompañamos con empatía, asertividad, rigor profesional y sensibilidad social.
Iniciar y consolidar un proyecto socioeconómico colectivo no es posible hacerlo sólo desde la necesaria viabilidad económica. El grupo debe tener también en cuenta las necesidades de las personas que lo conforman, los procesos e interacciones que surgen, las estructuras organizativas y toma de decisiones del grupo, la capacidad de evaluación y autoevaluación… todo ello, además, teniendo en cuenta que el contexto que le rodea le puede afectar positiva o negativamente. Desde Amanar acompañamos a los proyectos de una manera integral:
- Asesorando y ayudando en la gestión contable, fiscal, laboral, societaria y administrativa de los proyectos para optimizar sus resultados.
- Mentorizando y capacitando los procesos internos organizativos, de alianzas, de gestión y de toma de decisiones, para aumentar su eficiencia.
- Acompañando en la detección de necesidades e intereses de las personas y en la resolución de problemas para mejorar las relaciones de los grupos.
- Proveyendo las posibilidades de inter cooperación.
Nuestros servicios se dirigen a las siguientes entidades y sectores:
- Cooperativas (de trabajo asociado, de servicios, de consumo, de iniciativa social, de explotación comunitaria de la tierra, mixtas, etc.)
- Asociaciones (educativas, culturales, de ocio, artísticas, de consumo, rurales, ambientalistas, etc.)
- Federaciones, Confederaciones, Redes y Sindicatos.
- Sociedades Laborales y Autónomos.
- Sector cultural, artístico, musical, educativo, agroecológico y de servicios en general.
A principios de la década de los 90, algunas personas desempleadas vinculadas a diversas luchas y movimientos sociales comenzamos a plantearnos la autogestión de nuestras vidas incluyendo también el autoempleo cooperativo. Comenzamos a dejar de teorizar y de movernos de aquí para allá dando charlas sobre autogestión pues llegamos a la conclusión de que lo que hacíamos mayormente era gestión en auto. Y claro, eso de la autogestión, era otra cosa….
El objetivo no era solo salir de la precariedad y satisfacer nuestras necesidades económicas. También practicar y transitar modelos de autoorganización cotidianos donde lo colectivo tomara la dimensión que merece; situando a las personas en el centro, practicando la toma de decisiones y autoorganización colectiva, la horizontalidad, el apoyo mutuo, la corresponsabilidad, generosidad, solidaridad, lo común, la colectividad….
Y aprendimos que, desde la cotidianeidad, la dimensión de lo colectivo cobra mayor fuerza y valor. No sin dificultades ni contradicciones. También con errores y aciertos convertidos en aprendizajes para el común. Entendiendo y practicando siempre el solas a ningún sitio, y juntas, a cualquier parte.
Y del mismo modo que pensamos que salir de la precariedad y satisfacer una parte de nuestras necesidades era solo posible desde lo colectivo, pensamos que un proyecto colectivo no puede por sí sólo satisfacer todas sus necesidades y retos. Por ello, nuestro proyecto participa y forma parte de diversas redes y espacios como:
Con Baladre coincidimos en la década de los 90, en los primeros encuentros de economía solidaria que se celebraban en Córdoba. Eran tiempos en los que todos y todas, cada uno y cada una desde sus espacios, creíamos tener todas las claves y respuestas. Claves y respuestas únicas y a menudo, incompatibles con las otras. La economía solidaria, el sindicalismo, el ecologismo, las ONGs, los movimientos de protesta….
Años después, entendimos algunas que las respuestas no pueden ni deben ser únicas pues las necesidades y retos son muy amplios. Que las herramientas deben ser complementarias y que no son un fin en si mismo. Que la VIDA se hace y se forja desde lo común y cotidiano, enredándonos con otras, en colectivo, en red, con cuidados, haciendo comunidad.
Y en eso estamos…
Larga vida y felicidades a Baladre por estos 40 años. Por los enredos, por ser, por el hacer, y sobre todo, por el saber SER.